Golpe en el culo a la corona de flecos, este tío que es albañil aprovechó que el marido de la tía buena acababa de salir de compras para comerle el culo a la zorra hambrienta de pollas, el hecho de que estuvieran haciendo algo malo y pudieran pillarles en cualquier momento no hizo más que aumentar aún más la calentura. 
